Disculpen mi atrevimiento, pero para quien les escribe estas líneas, la declaración efectuada por la ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, en la que afirma que los ciudadanos podemos estar más tranquilos con la nueva Ley del Suelo, me han dejado impasible e indiferente. La susodicha Ley, “combatirá la opacidad y la especulación” en referencia, según ella, al caso de la 'Operación Malaya'.
Es más, para ello cuenta con la ayuda del ministerio de Economía y Hacienda que puso en marcha un plan de prevención del fraude fiscal, y una fiscalía especializada en delitos urbanísticos "la pieza clave que va a luchar contra la especulación". Y es que no me cabe duda que la ministra del ramo es una ‘mujer de paz’, a pesar de tener a de Juana Chaos en la calle… A lo que íbamos, la ministra se congratuló de las medidas adoptadas para fomentar el mercado del alquiler de viviendas, con ayudas a los propietarios que pongan sus casas en alquiler, de 6.000 euros a fondo perdido. Según sus fuentes, “entre 2004 y 2005 se incrementó en 130.000 el número de viviendas puestas en alquiler en España, de las que unas 58.000 fueron intermediadas por la sociedad pública de alquiler, expuso Trujillo”.
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